Este domingo 28 de febrero tuvo lugar en Asunción una reunión conjunta de representantes de las tres organizaciones de trabajadoras domésticas con el fin de planificar acciones en torno a la igualdad salarial de las trabajadoras mediante la moficiación del artículo que expresa la discriminación . Unas 30 trabajadoras domésticas de la Asociación de Empleadas Domésticas del Paraguay (ADESP), el Sindicato de Trabajadoras Domésticas del Paraguay (SINTRADOP). Y Sindicato de Trabajadoras Domésticas y Afines de Itapúa (SINTRADI) se reunieron para planificar acciones en torno a la superación de la discriminación salarial legal al sector.
Las trabajadoras discutieron en torno a la aplicación de la Ley Nº 5.407/2015 “Del Trabajo Doméstico” promulgada desde octubre pasado. La nueva ley –que contempla el acceso a la jubilación a este sector y a las ocho horas laborales al igual que el régimen laboral –aun no fue reglamentada y servirá para la formalización de un sector que emplea mayoritariamente a mujeres pobres. Después de muchos debates y lobby, las organizaciones además lograron que se excluyera de la ley el trabajo infantil doméstico, estipulando la edad mínima de 18 años, ya que en principio, en la cámara de diputados se votó un proyecto que refería a la posibilidad de empleo desde los 16 años.
El Artículo 10 de la Ley Nº 5.407/2015 establece que “el salario mínimo legal para el trabajo doméstico no será inferior al 60% (sesenta por ciento) del salario mínimo legal”. Es decir, que la obligación del empleador es pagar un salario de Gs 1.094.433, lo cual implica una discriminación, ya que el monto es mucho menor que el salario mínimo legal para el régimen general. Las representantes de las tres organizaciones domésticas planificaron la redacción de un anteproyecto para modificar el Artículo 10, que sería entregado en la Cámara de Senadores el próximo 30 de marzo, día internacional de las Trabajadoras del Servicio Doméstico. Ese día, a las 18. Horas se prevé una marcha en Asunción para reclamar la igualdad salarial.
Difusión de la ley entre empleadores
Uno de los temas discutidos entre las organizaciones es la necesidad de hacer llegar los contenidos de la ley del trabajo doméstico a los empleadores, ya que en el proceso de formalización conviene a las partes negociar una salida conjunta, sobre todo si la empleada doméstica nunca fue declarada en el Instituto de Previsión Social (IPS). Para eso, las trabajadoras elaboraron una serie de informaciones que entregarán mediante un folleto a las casas de los barrios que visitan.
Según una publicación del Centro de Documentación y Estudios (CDE) que recoge datos de la Dirección General de Encuestas, Estadísticas y Censo del año 2013, el 7,2% de la Población Económicamente Activa (PEA) ocupada se dedicaba al empleo doméstico ese año. Al desagregar los datos por sexo, solo el 0,9% de los hombres ocupados trabaja en este rubro, mientras que en el caso de las mujeres, esta cifra llega al 16% de las mujeres ocupadas. Es decir, en números, unas 235.771 personas se dedican al empleo doméstico y de este grupo, el 219.427 son mujeres y apenas 16.344 son hombres.
El encuentro de las tres organizaciones de trabajadoras domésticas fue posible gracias al Centro de Documentación y Estudios (CDE) con el apoyo de ONU Mujeres.