Desde Paraguay, el Grupo SUNU forma parte del “Colectivo de Mujeres del Chaco Americano” cuyo comunicado sobre el  asesinato de Berta Cáceres, lideresa indígena del pueblo lenca, en Honduras reproducimos como una forma de “no silenciar los asesinatos de mujeres por su lucha por la tierra y por un mundo otro posible”:

Foto: Fondo de Ayuda Urgente

Con mucha preocupación, las organizaciones y mujeres activistas del Colectivo de Mujeres del Chaco Americano, comparten un pronunciamiento en el que expresan su indignación y pena.

En abril de 2015, por su lucha Berta Cáceres recibió el Premio Medioambiental Goldman, importante reconocimiento mundial para activistas de medio ambiente. En esa oportunidad la BBC Mundo la entrevistó y publicó un artículo que decía: Ni las amenazas de violarla y lincharla. Ni las amenazas de atacar a su madre y secuestrar a sus hijas. Ni el asesinato de sus compañeros. Nada ha podido detener la lucha de una mujer hondureña.

 
Exigimos justicia. Exigimos el esclarecimiento de este asesinato. Exigimos protección y garantías para seguir defendiendo nuestros derechos. Solicitamos a los Organismos Internacionales de Derechos Humanos regionales e internacionales que reclamen al Estado Hondureño la investigación y sanción de los responsables.
Instamos al Estado Hondureño para que a través de sus instituciones, esclarezca los hechos del asesinato de Berta y brinde las garantías de protección necesarias a su familia y defensores y defensoras de derechos humanos de las organizaciones de las que hacía parte. Asimismo, le reclamamos proporcione las medidas – jurídicas y políticas- necesarias para garantizar la seguridad y proteger de manera eficiente a Gustavo Castro, quien fue testigo y herido durante el asesinato de Berta Cáceres.

Berta deja marcas en todos nosotras, señales sobre el valor de cuidar y ser cuidadas; de defender la vida y de luchar contra aquello que la destruye. Hagamos visible su voz y su lucha. Hagamos visible la voz de cada una de las mujeres que pelean y defienden sus derechos en el Chaco, en América Latina y el Caribe, en el mundo.
Nosotras seguiremos levantando la voz y organizándonos para continuar con nuestras luchas, con nuestras vidas y en nuestros territorios. Debemos denunciar, protegernos y cuidarnos sin miedo y organizadas.