La pandemia de la enfermedad por coronavirus muestra de manera clara y contundente las múltiples dimensiones de una crisis que afrontamos como sociedad. La crisis de un modelo económico que produce profundas brechas de desigualdad; la crisis de un mercado laboral caracterizado por la informalidad y precariedad; la crisis de un sistema sanitario raquítico y desabastecido que es incapaz de garantizar la salud como un derecho universal. Todos estos puntos críticos reverberan de distintas maneras y con variadas intensidades en el debate social que discurre en estos días. Sin embargo, hay otro foco de crisis que todavía no se aborda con la fuerza y seriedad que merece, pese a que resulta fundamental para el bienestar presente y futuro de la sociedad paraguaya: la crisis de los cuidados en el ámbito doméstico.