Encuentro Feminista del Paraguay 2013. Foto: Luis Vera

Patricio Dobrée gana premio SUSNIK 2018 con investigación sobre cuidados

Patricio Dobrée, investigador del Centro de Documentación y Estudios, fue galardonado con el primer premio a la investigación antropológica sobre Paraguay, que recuerda y rinde homenaje a la antropóloga Branislava Susnik. Su trabajo titulado “Prácticas, experiencias y significados del cuidado entre mujeres pobres que viven en el Bañado Sur de Asunción” aborda como la sostenibilidad de la vida, en todos sus procesos y formas, se encuentra ligada de manera indisoluble con el cuidado.

La investigación buscó comprender cómo las personas que viven en un contexto de pobreza urbana resuelven algunas de sus necesidades más elementales para reproducirse como grupo social y sostener diariamente la vida, además de escuchar como interpretan y experimentan lo que hacen. El trabajo de campo duró aproximadamente 5 meses comprendidos entre febrero y junio de 2016, durante un período en que los habitantes de los distintos barrios del Bañado Sur tuvieron que abandonar sus hogares debido a la crecida del río Paraguay, para asentarse provisoriamente en campamentos montados en diversos espacios públicos de la ciudad de Asunción.

Las preguntas de partida en la investigación: ¿De qué vida estamos hablando? ¿Qué implica sostenerla? ¿Cuál es el significado del cuidado?

La definición de la vida consiste en un proyecto por demás ambicioso y siempre inacabado, que ha estado en el centro del pensamiento filosófico desde sus orígenes, dice Dobrée. En este sentido, deja en claro que en este estudio se define a la vida como “esa multiplicidad de procesos biológicos, sociales y culturales que ocurren desde el momento en que nacemos, que nos permiten desarrollarnos como personas y que nos conectan con otros seres humanos y con la naturaleza que nos rodea dando forma y sentido al mundo que habitamos. Este es el espacio existencial que ocupamos como seres humanos y donde procuramos crear las condiciones necesarias para lograr aquello que definimos como bienestar”.

¿Y qué tiene que ver el cuidado con la vida?

Para que haya vida es necesario cuidarla, dice Dobrée. Todos los seres humanos necesitan cuidados para vivir bien. La definición usada del término cuidado en el estudio realizado, es su acepción más básica y elemental, “consiste en realizar una actividad concreta para ayudar a otra persona a efectuar algo que no puede hacer por sí misma. Dar de comer a un niño muy pequeño, acompañar durante un paseo a una anciana o suministrar sus medicinas a una persona enferma son tareas de cuidado”.

¿Entonces el cuidado se reduce a personas con algún grado de dependencia o que no pueden valerse por sí mismas nada más?

Aunque a veces nos cueste reconocerlo, los seres humanos requerimos cuidados durante todas las etapas de nuestro ciclo de vida, se afirma en la investigación. “Cuando llegamos a la adultez, pese a que logramos mayor autonomía, no dejamos de precisar alimentos que alguien debe preparar o una casa habitable donde vivir, así como muchas veces necesitamos que alguien se ocupe con afecto de nosotros en circunstancias desfavorables. Como seres interdependientes, el apoyo y la asistencia de otras personas resultan fundamentales para que nuestras vidas tengan continuidad”, escribe el autor en la introducción al texto galardonado.

¿Por qué los cuidados, tan relevantes y necesarios para la reproducción de la vida, pasan desapercibidos y no son reconocidos socialmente?

Por lo general, la responsabilidad del cuidado se transfiere al ámbito de las relaciones privadas bajo el supuesto de que las familias, y en particular las mujeres, son las principales encargadas de proveer bienestar a las personas. “La naturalización de este modelo organizativo tiene distintas implicancias. Por un lado, confina la reproducción social al plano doméstico, con lo cual libera a otros agentes de este compromiso. Esto es particularmente beneficioso para los mercados, porque así obtienen de manera gratuita el trabajo necesario para reproducir cotidianamente la fuerza laboral que los sostienen. Ello se logra mediante un sistema de representaciones que consagra el valor de lo que se produce para la esfera mercantil a la par que resta importancia a lo que se sucede en ámbitos desmercantilizados como el espacio doméstico. Por otro lado, dicho modelo contribuye a la persistencia de las desigualdades desde el momento en que ubica en una posición subalterna a determinados sectores de la población mediante una separación artificial y jerárquica de las esferas productiva y reproductiva. Estas diferenciaciones se producen mediante el reconocimiento de derechos para quienes se desenvuelven en la primera y la limitación o directa negación de los mismos para quienes son asociados a la segunda”.

¿Cómo viven e interpretan las personas en contextos de pobreza esta dimensión del cuidado?

El trabajo realizado, observando y escuchando las experiencias de vida de mujeres bañadenses, sostiene que las mismas “al encontrarse mayormente excluidas de los procesos de producción, distribución y consumo de la economía mercantil, buscan solventar sus necesidades materiales y simbólicas mediante otros mecanismos. El cuidado entonces se presenta como un recurso que permitiría generar algunas condiciones, aunque sea mínimas, de bienestar y de protección en un marco de vulnerabilidad material y simbólica. Pero como dicha actividad se realiza por fuera o en los bordes del mercado, el valor social atribuido a esta alternativa suele ser ínfimo”.


Sobre los premios Susnik 2018

Los premios Branislava Susnik se otorgan desde hace 17 años a los trabajos de investigación en antropología relacionados con el Paraguay. La comisión organizadora está compuesta por el Centro de Estudios Antropológicos de la Universidad Católica (CEADUC), el Museo Etnográfico “Dr. Andrés Barbero” de la Fundación La Piedad y la Asociación Indigenista del Paraguay (AIP).

El jurado integrado por la Dra. Isabelle Combès, Mg. Marilin Rehnfeldt, Dr. Rodrigo Villagra, Dra. Paola Canova y la Dra. Marina L. Sardi deliberó el día lunes 22 de octubre de 2018 otorgar cuatro premios con valores monetarios y dos menciones con recomendación para su publicación en el Suplemento Antropológico:

PRIMER PREMIO: “¿Cómo se las arreglan para sostener la vida? Prácticas, experiencias y significados del cuidado entre mujeres pobres que viven en el Bañado Sur de Asunción”. De PATRICIO DOBRÉE.

SEGUNDO PREMIO: “Finanzas y fantasmas: parentesco y nuevas prácticas mortuorias en la frontera paraguaya”. De CAROLINE SCHUSTER.

TERCER PREMIO“El grupo tradicional kamba cuá: música y danza en la formación del movimiento político-identitario afroparaguayo”. De CRISTHIANO KOLINSKI.

CUARTO PREMIO: “Enemigos afines. Parentesco y canibalismo en la mitología guaraní”. De JOAQUÍN RUIZ ZUBIZARRETA.

Menciones con recomendación para su publicación en el Suplemento Antropológico:

 “Los descendientes del Cacique Guairá y del Cacique Paragua”. De MARCELO BOGADO.

“La influencia del nacionalismo en la construcción de la memoria colectiva en el Paraguay 1936-1989”. De PEDRO CABALLERO.